Ambiciones que matan sediciosos de golpe de Estado quedarán solos
Por: Amaro Rodríguez S.
Se recordará como burda intentona de alcanzar el Poder
Hay ambiciones que matan como la protagonizada por el Presidente del Congreso de la República Manuel Merino de Lama, quien probablemente por ofertas tentadoras de otros sediciosos, lograron aprobar con el voto de 65 congresistas, admitir la moción de vacancia del Presidente de la República Martín Vizcarra Cornejo, acusándolo de incapacidad moral no bien definida, ni precisadas como causal de vacancia a causa de contenidos en audios grabados en Palacio de Gobierno.
El Presidente del Congreso que “capitaneó” la intentona golpista cometió un graso error y se olvidó que el Presidente Vizcarra Cornejo, fue reconocido durante ceremonia pública por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas como Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional del Perú. Merino de Lama para sentirse fortalecido tocó puertas de mandos de las FF.AA. en presunto logro de apoyo a la intentona sediciosa, olvidándose que esos mandos jerárquicamente son subalternos del Presidente Vizcarra
Las ambiciones de poder son muy tentadoras para gente deshonesta, se traman gastando tiempo y anergias muy necesarias en momentos de enfrentarnos a la pandemia del Covid-19 y ayudar a la reactivación económica, pero en intento de ayudar a borrar huellas de las mafias y funcionarios de diversos niveles que en el año 2019 robaron al Estado peruano 23 mil millones de soles, y de otros que en plena pandemia cometieron robos de “lesa humanidad” como traidores a la patria, algunos ya están siendo investigados.,
Esta intentona golpista como una de las ambiciones que matan, por el momento mató políticamente al Presidente del Congreso Merino de Lama y en la medida que la Fiscalía investigue, se conocerá más de cerca a otros activos conspiradores y algunos de sus promotores que ilusionaron a congresistas con cantos de sirenas y en intento de salir de ese embrollo, desisten en sus pretensiones y los conspiradores y sediciosos quedarán solos.