ColumnistasOpiniónPolíticaTendencia

SIN PALTAS, CON CRISHO

SAN MARTÍN AL 2026

Rumbos diferentes

Me parece sensato que vayan apareciendo los candidatos locales, aunque la experiencia indica que no por levantarse temprano, amanece más rápido. La experiencia ha demostrado y aconseja que no vale exponerse mucho, sino lo necesario, el resto lo dirá el contexto sociocultural donde se desenvolverán nuestros candidatos a la municipalidad provincial de San Martín-Tarapoto.

Sandro Rivero, según dicen las fuentes “fujimoristas” sería uno de sus candidatos, no vaya a ser nomas que al final se imponga algún allegado de Carlomagno Pasquel, como la tía Mary, y lo dejen tirando cintura a mi  ex –compañero de la Universidad San Ignacio de Loyola, no soy quien para darle consejos a Sandro, pero, alas y buen viento.

El ex –alcalde de la municipalidad provincial de San Martín-Tarapoto, arquitecto Tedy del Águila, de seguro que tiene un activo que demostrar y está en todo su derecho de aspirar volver al sillón municipal, seguro con otros aires, otros aliados y otros técnicos que Tarapoto y la provincia de San Martín lo necesita con urgencia para seguir moviendo la economía y la inclusión social.

El contador público, Juan Manuel García Ramírez, va por la tercera, y, no se trata de adivinar si ganará o no ganará, de lo que se trata es de “conectar” emocionalmente con los votantes, no nos olvidemos que las campañas son con cerebro emocional, y me atrevería a decir con cerebro reptiliano también, menos con cerebro racional o intelectual. El empresario, Henry Maldonado, que fue regidor y corren voces que será candidato, también es una ficha a tener en consideración.

Finalmente, no hay candidato pequeño o grande, ni bueno ni malo. Los procesos electorales en el Perú tienen mucho impacto de conductas culturales que hay que saber lidiar con la psicología de las muchedumbres.

APRISMO, IZQUIERDISMOS Y ANTAURISMO

Quién apueste por el Enfoque Social, podría ganar.

Lo que podemos ver y escuchar a menos 18 meses del nuevo proceso electoral regional y local son propuestas tecnicistas, frías, que nos hacen recordar a un alcalde cuando anunciaba; Lima, potencia mundial, y en la otra orilla, un esfuerzo de conjugación de lo técnico y social, que tendrá a sus candidatos del APRA, Antauro y las Izquierdas.

Trabajar para reducir la anemia en San Martín, alternativas al empleo informal, jóvenes que no terminaron la secundaria, agua y desagüe y luchar contra la pobreza urbana y rural, no basta ganar diciendo; “conmigo no hay vainas”.

Personalmente creo que el APRA, con la muerte de Alan García, tendrá su oportunidad para meterse por los poros de la piel no solo de sus votantes apristas, sino de aquellos que no son apristas y podrían votar por ellos.

Los Antauros más que colocar a los “cholos cobrizos” el fusilamiento como alternativa, deben pensar quehacer por la región San Martín, no con cantos de sirena sino con ideas claras y realizables, para ello, deben convocar a empresarios, profesionales para labores multidisciplinarias.

Finalmente, siento que la izquierda regional se quedó sin propuestas, a pesar que existen profesionales en sectores como salud, educación, desarrollo social y empresarios, lo que falta es un “Mesia” que junte a todos, y, también no dejarse absorber solo por la “lucha contra la pobreza”, sino fomentar el “crecimiento económico”, que también es una forma de luchar contra la pobreza.

JAIME DE ALTHAUS Y  EL 2026

Análisis antropológico.

Lo positivo del análisis del antropólogo Jaime De Althaus es que lo dijo cuando aún no salía el informe de pobreza y extrema pobreza del INEI al 2023. El economista, David Tuesta, antes del informe del INEI, dijo que  la tasa de pobreza del 2023 habrá llegado con alta probabilidad al ¡30%!

¿Cuál podrá ser el resultado de una elección el 2026 con 33 o 34% de pobreza y decenas de candidatos, alta inseguridad, anarquía y descomposición institucional?, el mismo colega Jaime De Althaus, pro-mercado, enfadado informo: sería el escenario ideal para un ‘outsider’ autoritario y antisistema porque los electores no verían nada que defender en un orden que solo les ofrece dificultades, temor y hambre.

Y, cual filósofo griego con la lámpara en el día, grita; necesitamos llegar al 2026 con una economía en  crecimiento y con reformas políticas e institucionales básicas. La pregunta, entonces, es: ¿qué esperan el Gobierno y el Congreso para ponerse de acuerdo en una agenda de reformas económicas y políticas? esa es la pregunta que no hacemos todos colega De Althaus.

Finalmente, necesitamos un mea culpa de todos los sectores, Jaime De Althaus, es un pensador pro-mercado y amigo de los empresarios del Perú: para recuperar la fe y esperanza es indispensable volver a crecer a tasas altas. Hay que ver el futuro: un puerto de Chancay,  una potente minería de cobre y de litio muy demandadas por la transición energética mundial, y que les da aún más competitividad a nuestras agro-exportaciones, junto a un turismo expansivo.

 

POBREZA Y ELECCIONES AL 2026

Carolina Trivelli, Jaime Herrera y Waldo Mendoza

Según la economista Carolina Trivelli son casi 10 millones y hay más niñas y niños en estas familias. Para muestras un botón, en nuestros trabajos de campo para diseñar problemas públicos en una institución educativa de nivel inicial; un niño de tres años padece cáncer, su madre murió con cáncer y ahora los tíos solo esperan el desenlace final, porque no tienen dinero para llevarlo a Lima (son de provincia). Dos niños están inmersos en familias disfuncionales y una niña vive con su madre analfabeta y su padrastro que pertenecen al grupo de extrema pobreza. ¿Quehacer?, protección a quienes la están pasando mal, ayudarles para que se alimenten, salud y un lugar donde vivir y apoyo a los microempresarios que perdieron su capital de trabajo para reactivarles dentro del mercado.

Para el economista Javier Herrera, el año 2023, hubo recesión, inflación y cayo la empleabilidad nacional. La pobreza creció en zonas urbanas, por ejemplo, Lima, en el año 2019, uno de cada cinco era pobre. Hoy, uno de cada tres es pobre y vive en Lima. Sobre la gente que no tiene que comer, en el año 2019 en Lima, uno de cada veinte. Hoy, uno de cada cinco. La pobreza no solo es rural, que se incrementó al 40%, sino la pobreza hoy, es urbana. Seis de cada diez peruanos, se fueron a dormir sin comer.

Waldo Mendoza, ex –ministro de economía señala que los peruanos nos hemos empobrecido y ahora tenemos menos ingresos. Hemos controlado la inflación, pero, necesitamos crecer a tasas mayores del 4% para luchar contra la pobreza. Somos un país informal, difícil de recaudar impuestos. Las pensiones son “causas perdidas”, la gente no quiere ahorrar, ¿o, no tiene?, el subrayado es mío. ¿Quehacer? Aprovechar el precio alto del cobre-industria minera y puerto Chancay, para abaratar nuestras exportaciones.

Finalmente, por donde ir,  al 2026, en el pasado se pedía un líder honesto, ahora es urgente, ubicar a un líder con buenas intenciones.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *