Colombianos arrestados por alterar el orden público y liberados por la Policía Nacional, intervenidos nuevamente por agentes de Seguridad Ciudadana de Trujillo
Dos hombres y dos mujeres, una de ellas de 16 años de edad, todos de nacionalidad colombiana, que habían sido intervenidos hasta en tres oportunidades por protagonizar escándalo y alterar el orden público en aparente estado de drogadicción, tras lo cual fueron puestos en libertad por la Policía Nacional a los pocos minutos, obviando los controles de identidad, migratorio y de requisitorias, entre otros, han sido intervenidos nuevamente por los agentes de Seguridad Ciudadana de Trujillo y del grupo Intervenciones Rápidas Municipales (IRAM), quienes, una vez más, los han puesto a disposición de los efectivos policiales de la Comisaría Ayacucho, con la finalidad de que en esta oportunidad sí cumplan con sus funciones.
Se trata de Luis Fernando Mesa Espinoza (21) y Laura Yuliana Gerardo Bedolla (18), así como Andrés Camelo Cardona Pérez (20) y L. G. M. E. (16), todos ellos en aparente estado de drogadicción, tal como fueron intervenidos anteriormente, ya que entre sus pertenencias se encontró botellas de plástico con sustancias tóxicas y latas con terokal, y presentaban problemas para articular palabras y entender lo que los agentes ediles les explicaban.
Según se ha podido conocer, los dos primeros han sido intervenidos a las cinco de la tarde de este martes, en la urbanización La Perla, y los últimos a las siete de la noche, en la plazuela Pinillos, de la urbanización Santa María, en circunstancias del servicio de patrullaje preventivo que realizaban los agentes a bordo de dos patrulleros de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad Provincial de Trujillo.
En ambos lugares, durante las intervenciones, los moradores y transeúntes han exigido a los efectivos de la Policía Nacional cumplir con sus funciones y aplicar la ley a los colombianos, ya que hasta el momento no lo están haciendo, y, de manera irresponsable, como si la seguridad no fuera cuestión de ellos, dejan en libertad a los extranjeros apenas son puestos a su disposición, sin efectuar ningún tipo de control ni solicitar la intervención del Departamento de Seguridad del Estado, que para eso existe.
